Después de esa larga espera, de la búsqueda de ese esperado
cambio, te das cuenta que ya no puedes seguir mintiéndote.
Por mucho que desees que alguien deje de ser como era y se
convierta en esa persona que dice que será, después de muchos pasos en falso y
de todas las lagrimas que se han deslizado por tu rostro, abres los ojos e
intentas hacerte esa promesa de nuevo: “No voy a volver a caer en el mismo
engaño! Aunque sea la cosa que más me duela en el alma. Definitivamente se ha
terminado."
Es entonces cuando pasas pagina e intentas olvidar todos
aquellos momentos que habían sido tan especiales, únicos e irrepetibles, con la
esperanza que esa persona no se vuelva a cruzar en tu camino.
Ahora puedes empezar a construir tu nuevo destino y conocer todo
aquello que hasta ahora no habías sido capaz de ver, porque estabas hechizado
por una turbia nube de mentiras y engaños que te hacían prisionero de tu propio
ser.
Diviértete, ríe, descubre, viaja, experimenta, emociónate, goza
y sumérgete en la cálida presencia de todas aquellas personas que siempre han
estado a tu lado y que no han dejado de creer en ti ni un solo momento, de
aquellas personas que siempre te han apoyado en los momentos más difíciles.
Debes tener muy presente que el resto de personas que solo fingen ser alguien
que realmente nunca llegaran a cumplir.
Esas personas son las que no merecen formar parte de tu vida.
Porque no te debes tener a alguien que no sepa valorar todo aquello que has
sentido y que no aprecie la infinidad de cosas que has llegado a dar de ti
mismo. Lo único que ha hecho es despreciar todo lo que le has ofrecido en tan solo
un instante sin tener respeto alguno.
No dejes que alguien desconsiderado, egocéntrico, calculador y vacío por dentro arruine el resto de tus días. Aún estas a tiempo de cambiar tu
destino.
Anna Muxí